Es
llamado aborto espontáneo a la
pérdida del embarazo antes de las 20 semanas de gestación, por desgracia esto
ocurre más veces de las que se puede llegar a creer, después de que la mujer se
realice el test de embarazo entre un 10 y un 15 por ciento acaba en aborto
espontáneo y este porcentaje sube hasta el 40% si contamos también los abortos
que ocurren antes de que la mujer llegue a hacerse el test.
La mayoría de los abortos
espontáneos ocurren antes de las 12 semanas de gestación y no se puede
indicar un motivo concreto por el que se produce, pero puede ser por diferentes
causas.
En la
mayoría de los casos el feto no llega a desarrollarse por anomalías cromosómicas, esto es más habitual en padres con edad
avanzada.
En la pérdida del embarazo puede influir también el ritmo de
vida de la madre, por ejemplo una mujer fumadora y consumidora de alcohol tiene
más posibilidades de experimentarlo.
Cuando la madre tiene algún problema de salud importante también puede poner en riesgo al feto.
Los síntomas
del aborto espontáneo son sangrado vaginal y/o dolores abdominales fuertes,
si estás embarazada y experimentas cualquiera de estos síntomas acude a un
hospital.
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